Proceso revoluciona la recuperación de agua en la extracción de litio

Extracción de litio
Debido al creciente auge de la electromovilidad y la demanda mundial de baterías, los métodos de extracción de litio adquieren un papel fundamental. Asimismo, Cochilco proyecta un incremento en la demanda, pasando de 327 kt de carbonato de litio en 2020 a 2,114 kt LCE en 2030.
Esta tendencia resalta la importancia de hallar tecnologías eficientes para la extracción de litio y satisfacer las necesidades del mercado. También subraya la relevancia de abordar el impacto ambiental provocado por métodos tradicionales, como la evaporación de piscinas de salmueras.
La extracción convencional de litio implica la evaporación de agua mediante la energía solar en grandes piscinas de salmueras. Sin embargo, este proceso presenta inconvenientes, como su duración prolongada (hasta 24 meses) y su dependencia de las condiciones climáticas. Además, se pierde gran cantidad de agua, con el salar de Atacama evaporando diariamente entre 20,000 m3 y 50,000 m3 de agua que se pierde en la atmósfera.
Para abordar este problema, desde 2018, el AMTC (Advanced Mining Technology Center) ha estado desarrollando el proceso LiSa. Este permite la concentración y purificación de litio a partir de las salmueras, al mismo tiempo que recupera el agua extraída.
El proceso LiSa en la extracción de litio
El proceso LiSa, dirigido por el Dr. Humberto Estay y la investigadora Lorena Barros, se basa en la destilación y cristalización por membranas. Así separan el agua de la salmuera y obtenien una salmuera concentrada en litio. A diferencia de los procesos de extracción directa de litio (EDL), LiSa no extrae directamente el litio de la salmuera. En cambio, concentra la salmuera y cristaliza otras impurezas como cloruro de sodio, cloruro de potasio y cloruro de magnesio. Así purifica la salmuera de litio hasta alcanzar una concentración adecuada para producir carbonato o hidróxido de litio.
En el laboratorio, el equipo del Dr. Estay recuperó hasta un 40% de agua de alta calidad en un ciclo. Esta cifra puede aumentar en ciclos repetidos.
Por su parte, la investigadora Michelle Quilaqueo señala que el líquido recuperado es casi puro y puede utilizarse para diversos fines. Se puede reinyectar en el proceso, recircularlo o utilizarlo como fuente de agua para la agricultura.
El proceso LiSa presenta varias ventajas adicionales. No depende de factores climáticos. Utiliza agua recirculada en lugar de agua fresca. No emplea reactivos y genera subproductos de valor comercial, como cloruro de potasio.
Actualmente, el proceso LiSa se encuentra validado a escala de laboratorio. El siguiente paso es solicitar fondos públicos para construir una planta piloto de mayor tamaño. Y eventualmente, escalarlo a nivel industrial.
Interés empresarial en el proceso
Empresas mineras, como Vipure y Simco, están interesadas en implementar el proceso LiSa a nivel industrial. Vipure ha apoyado el desarrollo de procesos de membranas desde el inicio. Mientras que Simco está evaluando la instalación de LiSa en su planta piloto ubicada en el salar de Maricunga. Esta colaboración permitiría complementar su proceso de extracción directa. Esto, con la obtención de agua fresca a partir de la salmuera, generando circuitos cerrados sinérgicos muy prometedores.
El Dr. Estay destaca la versatilidad del proceso LiSa en términos de cantidad y calidad del agua recuperada, adaptándose al balance hídrico específico de cada salar. Esto significa que es posible recuperar una fracción menor, como un 5% o 10% de agua de alta calidad, y reinyectar el resto de la salmuera en el salar. En otros casos, donde el balance hídrico permite recuperar un 30% de agua fresca, LiSa puede diseñarse para ese propósito. Además, el agua recuperada puede tener múltiples usos, lo que brinda flexibilidad y sustentabilidad al proceso de extracción directa.
El equipo se encuentra transferirá esta innovadora tecnología a la industria minera en el momento adecuado. A través de la construcción de una planta piloto y las evaluaciones técnico-económicas correspondientes, buscan hacer posible la implementación a gran escala del proceso LiSa, revolucionando la extracción de litio y la recuperación de agua en la industria.
Con información de Reporte Minero